La gestión energética se ha convertido en un requisito básico para la sostenibilidad económica y medioambiental de los edificios, especialmente si se trata de grandes instalaciones donde este tipo de soluciones son imprescindibles para garantizar una necesaria eficiencia energética.
En TALAT, hemos participado en múltiples proyectos que integran la gestión eficaz de sistemas para mejorar la eficiencia energética. Esta gestión ofrece una información y un control que resultan muy útiles para tomar decisiones razonadas sobre el consumo energético, pero también para que estos sistemas sean más funcionales y ofrezcan mejores servicios a los usuarios de esos grandes edificios.
Qué es la gestión energética
Se considera gestión energética al conjunto de soluciones que se adoptan para optimizar el consumo energético de un edificio. Esto incluye desde la planificación al mantenimiento de las instalaciones, pasando por el uso consciente y racional que permita disminuir el consumo y reducir costes, pero sin que eso afecte a la calidad de los servicios.
La gestión energética incluye diversas técnicas, procesos y sistemas que se pueden implementar a diversa escala, desde un hogar particular hasta grandes complejos hoteleros o instalaciones deportivas.
En el caso de las grandes instalaciones, la gestión energética es una herramienta necesaria que complementa otras medidas a favor de la sostenibilidad de los edificios. No se trata solamente de hacer uso de energías renovables o instalar sistemas de domótica y control, sino que la gestión energética es integral, incluye el monitoreo del consumo energético, análisis de datos, planes de previsión y su seguimiento, o cualquier otra solución destinada a mejorar la eficiencia energética y reducir costes.
Objetivos de la gestión energética
El principal objetivo de la gestión energética es aumentar la eficiencia energética de las instalaciones de un edificio como su climatización, iluminación u otros equipos eléctricos. Una buena gestión energética se traducirá en un consumo energético mínimo, en el que se gaste la menor cantidad de energía posible para llevar a cabo un proceso; eso sí, siempre garantizando el bienestar y la seguridad de los usuarios.
Pensar en la eficiencia energética de los edificios y cómo mejorarla permite minimizar el impacto de su huella ecológica, evitar el derroche energético y, en consecuencia, reducir los gastos derivados no solo del consumo, sino también del mantenimiento de los equipos, generando así un importante ahorro económico.
Pero, además, teniendo en cuenta que cada vez hay más normativa relacionada con la promoción de la sostenibilidad y eficiencia energética de los edificios, tanto a nivel local como internacional, la gestión energética resulta necesaria para asegurarse de que se cumple con la legislación vigente en cada proyecto. En nuestros trabajos de ingeniería, en la redacción del proyecto, a menudo incluimos la tramitación de licencias y licitación de instalaciones; esta fase también se realiza desde el punto de vista de la gestión energética para cumplir con todos los requisitos que se establecen por imperativo legal.
3 ejemplos de sistemas de gestión energética en grandes instalaciones
En TALAT, hemos participado en la instauración de sistemas de gestión energética en proyectos muy diversos, a menudo de gran envergadura. Estos sistemas se refieren a soluciones tecnológicas innovadoras de bajo consumo como las instalaciones que utilizan energía renovable geotérmica, aerotérmica o fotovoltaica; pero también incluyen la valoración y asesoramiento en cada caso, la redacción de planes de actuación, su ejecución o el seguimiento del proyecto hasta comprobar que efectivamente se cumplen los objetivos que se habían propuesto.
A continuación, repasamos tres ejemplos de proyectos muy diferentes, sobre distintos tipos de construcciones y circunstancias, pero que tienen en común el ser instalaciones de grandes dimensiones y que en todas se implementaron soluciones para mejorar la eficiencia energética.
Hipotels Playa de Palma
Con frecuencia, la gestión energética actúa sobre un mix de soluciones técnicas. En cada proyecto, se estudian cuáles son las fórmulas más adecuadas y se diseña un plan específico.
Un claro ejemplo es el Hipotels Playa de Palma de Mallorca, donde llevamos a cabo distintas actuaciones para mejorar la gestión energética de un complejo hotelero que incluye un hotel de 4* y otro de 5*, además de restaurantes, piscina cubierta y descubierta, zonas de spa o un centro de convenciones con capacidad para 1000 personas, entre otros.
Este complejo cuenta con la mayor geotermia abierta de las Islas Baleares, que mueve un millón de litros por hora, a la que se le suman aerotermia y placas solares para crear un sistema de gestión optimizada de movimiento del agua con válvulas de dos vías inteligentes en cada equipo. Además, todas las instalaciones eléctricas son domóticas, lo que facilita su gestión en remoto.
Hipogeo del Estadio Santiago Bernabéu
Para el hipogeo del recientemente remodelado Estadio Santiago Bernabéu, nos encargamos de la reingeniería e instalación de los sistemas de HVAC para la climatización de este invernadero subterráneo donde se “aparcan” las bandejas que contienen el césped del terreno de juego. Diseñamos y ejecutamos el sistema que mantiene el césped en condiciones óptimas de temperatura y humedad mientras se encuentra en el interior.
Además, también implementamos sistema de gestión (BMS) para controlar tanto la climatización como la automatización del sistema de césped retráctil.
Centro de Formación Náutica de Alcúdia
Tras haber sido los ganadores del concurso de méritos presentado por la Consellería del gobierno balear, nos encargamos del proyecto de ingeniería, la dirección ejecutiva material, la dirección de obra de ingeniería y de la coordinación de seguridad y salud.
El objetivo de este proyecto era la construcción de un nuevo edificio sostenible para la formación náutica en este centro del Puerto de Alcudia, en Mallorca. Este consta de 6 aulas, 4 talleres, vestuarios, zona de oficina y espacios comunes. Para la gestión energética del edificio, se implementaron sistemas que utilizan energía solar térmica y fotovoltaica, así como aerotermia, con la intención de obtener la calificación energética A.
Estos tres ejemplos, pese a sus enormes diferencias, tienen en común la preocupación por el aumento de la eficiencia energética en el sector de la construcción como un valor preferente. La gestión energética se puede aplicar a cualquier tipo de proyecto. En TALAT, te escuchamos para diseñar la solución más adecuada para el tuyo; ponte en contacto con nosotros y cuéntanos cuál es.